¡lenguas afuera!
La vida es muy seria señores, pero si no la enfrentamos con un toque de alegría estamos mal... ¡Sácale la lengua a los problemas!... y no dudes en llamarme para acompañarte en esta gran tarea...
¡Nada es más asombroso!
Si claro, es imposible no maravillarse ante los avances de la tecnología. Pero más asombrosa es la capacidad del ser humano de adaptarse a ella. La sed de aprender te abre puertas y ventanas a mundos no imaginados. La actitud ante el cambio te mantiene en el juego y te permite disfrutar de pequeños grandes momentos. ¡Gracias Opa por tu ejemplo!
Todo un personaje
Las Gross nos hemos caracterizado por llevar rayitos de luz a donde vamos... nunca nos falta una sonrisa, una palabra de aliento a quien la necesite, un abrazo y un saco lleno de sueños e ilusiones... porque si de algo estamos más que seguras es que vamos a cambiar el mundo (¡sólo hay que ser un poquito pacientes!)
Luchamos, peleamos, nos agarramos bien duro a lo que queremos y a quienes consideramos importantes. Y no soltamos presa tan fácil... por no decir que la terquedad es una de nuestros peores defectos... y la ingenuidad... porque aunque nos lastimen juramos que la gente cambia y serían incapaces de volver a hacernos daño.
¡Todo un personaje!... si señor... conocer a una Gross es una experiencia increíble... así que aquí les presento a Karla: una niña bella, dulce y, como buena Gross, terca...
Mi hermanita bella, que olvida que a veces hay que dejar que otros nos den una mano para que esos sueños puedan hacerse realidad más eficientemente y rápido...
Dar es sinónimo de alegría y crecimiento personal
En el año 2005 un grupo de estudiantes de 7mo. año del Colegio San Lorenzo visitó la escuelita del Cen-cinai de Tirrases. Como profesores guía, Diego y yo, los organizamos para llevar juegos, alimentos y muchas ganas de pasar un rato bonito, con la esperanza de que los chicos aprendieran algo más que comportarse fuera de la institución y el valor del trabajo en equipo.
Los juegos, los lápices de color, las acuarelas, las barras de plasticina, los cuentos, los regalos y la merienda resultaron lo menos importante. Los niños disfrutaron hasta más no poder. Nuestros chicos dieron lo máximo de sí y crecieron más que nunca... descubrieron que dar puede ser fuente de alegría verdadera y eterna, que la felicidad de otros no tiene precio... ¡ni la misma propia!... que los que menos tienen existen y sufren y que en sus manos está el poder aliviarles un poquito la carga diaria.
Con asombro comentaban que los niños del centro no conocían los helados ni las acuarelas... ni el cuento del Patito Feo o Caperucita Roja... y más sorprendente aún... ¡una caricia!
Aprendieron que han tenido mucho en sus vidas... agradecieron su suerte y se comprometieron a ser más solidiarios con la gente que les rodea que no siempre estan a la vista. Agradecieron poder salir del cascarón en el que habían vivido y el poder descubrir ese "yo" que puede hacer algo por alguien a cambio de nada...
En tiempos tan complicados, el sensibilizar a los más pequeños debe convertirse en nuestra tarea principal... y esto no se logra por medio de internet, ni libros, ni televisión... sino poniéndolos en contacto con la realidad y facilitandoles herramientas para que se hagan participantes activos de un cambio social que, sinceramente, ya es urgente.
Cuando un angel te acompaña...
¿Crees en ángeles?... ¿alguno te acompaña?... he oido y leido acerca del tema para intentar explicar qué he sentido en momentos de peligro o soledad... he conseguido mil nombres, mil funciones, mil asignaciones... que si tu signo es x tu angel de la guarda es y, que si nacistes en tal año seguramente fulano te acompaña...
Desde el inicio le puse nombre: "Abuelita Elizabeth"...pero ella no sale en ningún libro ni página de internet... es mía, y estoy muy segura que de mis hermanos también... y no se trata de creer o no, de rezar o ir a misa, de prender velas o hacer un altar en casa, ni de baños y jabones, piedras, amuletos, oraciones......sino de su amor de abuela desafiando tiempo y espacio... y una nieta que hubiera querido conocerla y se deja consentir ahora, porque nunca es tarde cuando de cariño sincero se trata.
La gente importante...
Definitivamente existe gente muy importante: mi mamá y Walter. Por ellos soy quien soy hoy en día... por ellos muchas crisis de asma fueron superadas, muchos miedos enfrentados, muchas dudas resueltas, muchas ilusiones armadas y un mundo de magia y optimismo dificil de destructurar... por ellos se que realmente lo que se quiere y anhela se puede alcanzar si pones todo tu empeño en lograrlo... por ellos se que caerse no significa fracasar sino una nueva oportunidad para hacer las cosas bien (porque la capacidad para salir adelante nunca desaparece, simplemente hay que activarla y ponerla en marcha)... por ellos tuve la oportunidad de creer en milagros (uno llamado Javier)... por ellos me mantengo en pie en medio de cualquier tormenta... a ellos les debo unas hermanas increíbles (Meche y Titi)... por ellos se lo que vale una familia... a ellos les debo entender que toda persona tiene un valor infinito... me enseñaron a escuchar y a descubrir en la mirada el brillo que recuerda que cada uno de nosotros es un ser único, mágico e irrepetible, con todo el poder en sus manos para cambiar al mundo... y mil cosas que posiblemente nunca se hubieran cruzado en mi camino si ellos no hubieran abierto la puerta de la aventura que significa ser parte de este mundo...
Se me pasan por alto millones, billones, trillones de detalles, pero aprovecho este espacio para agradecerles publicamente mis existos y fracasos, mis valores, mis sueños, mis ideales.
La distancia...
Una vez escuché decir que la distancia no se mide en kilómetros... ¡cuán cierto!... pues nunca me he sentido lejos de mi familia a pesar de que vivimos en países diferentes: mi padres, una hermana y un hermano en Venezuela, además de mi abuela consentida, una hermana entre Alemania y España, dos hermanos y una hermana en Estados Unidos... esto sin contar primos y primas que también iniciaron su aventura por el mundo y otros parientes que esperan en el cielo...
¡Aplica también con l@s amig@s! Definitivamente la distancia que exista entre las personas y tú es una cuestión de desición. No hay excusas para dejar ir de tu lado a la gente realmente importante, menos ahora con tantas facilidades tecnológicas.
Espero sinceramente que, cuando tengan que separarse de un ser querido, recuerden no medir la distancia en kilómetros... sino en sentimientos...